Nepal-Tibet. Capítulo 6: El yak nunca es suficiente
Otro despertar muecinero. Ya empezábamos a acostumbrarnos y casi no se oía el largo berrido. Hoy era la prueba más dura: el ascenso a los 5000 metros para el que habíamos estado entrenándonos en Lhasa y especialmente en las escaleras de Potala. Al llegar a la recepción nos encontramos con el que sería nuestro tercer guía: Tenzin. Tenzin era un tipo mayor que Gyatso y menor que Puchuk. (curioso que el Dalai Lama actual se llame Tenzin Gyatso, y nosotros hayamos tenido de guías a Tenzin y a Gyatso. Supongo que será como llamarse Juan García aquí…) Rondaba los 35 y era un tipo afable con un inglés pésimo del que luego iríamos descubriendo facetas espirituales y abertzales.
Sin más retrasos, y prácticamente a la vez que las chicas valencianas, salimos del hotel Flora despidiéndonos de Lhasa. Vimos que ellas tenían un todo terreno, frente a nuestra furgonetilla Hiace… A veces era un poco preocupante pensar que íbamos a pasar por todos esos pasos de montaña y a llegar hasta Nepal con ese trasto.
Poco después de dejar Lhasa atrás, llegamos a un lugar junto al río en el que había muchas banderitas de colores de las que usan los budistas para lanzar oraciones. Tenzin nos explicó que los budistas que no pueden permitirse un funeral y entierro en condiciones para sus difuntos, lo tiran al río. Al parecer ésta era la zona de lanzamiento del área.
Después de hacernos una foto, nos enteramos de que desmembraban los cuerpos antes de lanzarlos, y había una piedra específica para ello. Cualquiera se come un pez de este río… Bueno eso es lo que entendimos, tampoco podemos fiarnos mucho de lo que entendemos a un tío que para pronunciar lago en inglés dice “lec”
No tardamos mucho en empezar a subir nuestro primer puerto en la carretera de la amistad. El puerto era espectacular: montañas enormes a los lados, la carretera estrecha y serpenteante por el centro, un abismo a la derecha… y el driver adelantando sin visibilidad constantemente! Daba igual la línea de la carretera, daban igual los cambios de rasante o las curvas formando ángulos de 45º. El tipo se lanzaba, sin ningún tipo de prisa, al carril contrario, siempre sonriente.
Vimos varios yaks por el camino y le comentamos a Tenzin que nos dejara hacernos fotos, pero nos comentó que esa gente era avariciosa y nos querían cobrar. Pronto sabríamos que Tenzin tenía una especie de cruzada particular contra la avaricia (y contra muchas otras cosas), ya que era un budista pro.
Poco a poco, íbamos notando la falta de oxígeno, un poco de mareo, dolor de cabeza que iba y venía. Estábamos llegando al primer paso de montaña, Sima La (La significa paso en tibetano). Poco antes de llegar encontramos un grupo de yaks pastando sin compañía. Allá nos bajamos, a unos 4300 metros, a hacernos fotos con los yaks. Las chicas de Valencia, que tenían nuestro mismo recorrido, se bajaron a la vez que nosotros.
Los yaks son bastante mansos, pero imponen. De hecho, hubo un momento en el que el yak empezó a acercarse y salimos todos todo lo corriendo que permitía la pendiente y la altitud (nada más salir del coche ya estábamos reventados)
Poco después llegamos a Sima La, con sus 4780m
De allí empezamos a bajar, hacia el lago Yamdroke. Éste era un lago sagrado para los tibetanos, el segundo más grande de Tibet. Sin embargo los chinos habían empezado a explotarlo y enmarranarlo. El lago tenía unos colores bastante cambiantes, con la luz extraña y las nubes variables de esa zona. El lago estaba petado de chinos, como casi todo por aquí.
Seguimos hacia los pasos de montaña de Khampa La y Kharo La, este último con 5045metros. Vimos nuestro primer glaciar, bajo el un poblado nómada, del que volvimos a intentar obtener la World press Photo. Con poco éxito.
Continuamos nuestra ruta por la friendship highway para encontrar un lago de color increíblemente verde, que después supimos era artificial y alimentaba una central hidroeléctrica. También tenía su punto sagrado, ya que había cienes de banderas.
Por fin llegamos a Gyantse, nuestra primera parada importante. Lo primero que llamaba la atención era la fortaleza en la montaña.
Tenzin nos llevó a ver la Khumbun Stupa, un edificio con 100.000 imágenes de buda, y un montón de capillas, que se levantaba hasta dominar la ciudad. La stupa era muy elegante, además de única, al parecer, hay 2 tipos de stupas, las que eran tumbas y las que no, y luego está un tercer tipo del que sólo hay 2: ésta y otra en otro pueblo.
Sin embargo, en todo momento mantuvimos la mirada fija en la imponente fortaleza que dominaba toda la llanura.
En lo alto de la stupa nos encontramos con… sí! Las chicas valencianas. En este punto, entre altura, temitas gástricos varios, y Xhabitse que había cogido un señor catarro, estábamos todos bastante jodidos, así que una vez más nos vino estupendo encontrarnos con las chicas para conseguir antihistamínicos y otras drogas y recomendaciones gratis. Ellas se quedaban en Gyantse porque hacían la ruta en modo relax (sin ascenso al campo base del Everest). Nosotros seguíamos nuestro camino.
Antes de salir de Gyantse, Tenzin nos llevó a hacer unas fotos a la fortaleza.
Cuando pensaba que nos íbamos a ir, nos dijo que no, que nos llevaba a comer algo a donde unos amigos suyos. En efecto, nos metió en una casa particular, donde una señora nos sacó unos tazones de sopa. Los menos avispados no tuvieron tiempo de decirle que no echara la salsa picante habitual. Luego lo sufrieron. El sitio era acogedor, olía a incienso, y se oían las alegres conversaciones de los dueños con el driver y Tenzin. Iñigorkha se dedicó a hacer fotos a los dueños.
Al salir de Gyantse, Pokharlos preguntó a Tenzin quién era el mejor cantante de Tibet. Nos dijo que un tal Kunga, pero no tenía nada suyo en la Toyota, así que seguimos sufriendo el cocidito conileño de Pokharlos, con todos los “éxitos” del verano, y que al driver le encantaba!
Entre Gyantse y Shigatse hay unos 100 km. Los 100 km son una recta. Perpetua. Los paisajes de la meseta tibetana son espectaculares, pero el viaje continuó sin nada destacable, salvo la visita al baño del driver, que paró de pronto la furgoneta, cogió un rollo de papel y entró en comunión con la naturaleza delante de todos.(no sería la última vez, lamentablemente)
Por fin llegamos a Shigatse , ya en noche cerrada. El hotel estaba bien, los baños funcionaban (a diferencia de Flora hotel), y teníamos tele, donde nos pusimos a ver el canal chino de deportes, hasta que llegó la tormenta más brutal que he vivido, y nos dejó sin luz. Durante casi una hora, truenos que parecían terremotos, y relámpagos permanentes estuvieron azotando el pueblo. La frecuencia de los relámpagos era exagerada, había periodos de 8 ó 10 segundos en los que la habitación estaba completamente iluminada porque había 20 rayos seguidos. Así nos dormimos, primera noche a 4200 metros.
8 comentarios sobre “Nepal-Tibet. Capítulo 6: El yak nunca es suficiente”
Ostia qué guapo! Y por fin veo que empiezan a aflorar las fotos de Bai Ju hehehe. Me estáis dando una envidia de la ostia, creo que algún año estos voy a tener que ir yo también a probar el yak…
si, cada vez hay mas. a medida q pasaban los dias yo me cansaba de hacer fotos y los demas me las hacian a mi..
Por cierto! He visto también parte del video 16 de tu vimeo, y al principio pensaba que era un video paródico ;D.
que dices! jaja si es mi primo! q perro!
Jejeje, que era tu primo me he dado cuenta al minuto o así, porque la verdad es que os dais un aire, pero es que el tío habla tan serio tan serio que parece que es de mofa ;D.
No me había fijado hasta ahora pero la foto de la niña con la abuela (o madre envejecidisima) merece ser la WordPress photo por un detalle: el billete de la niña en la mano que muestra a la perfección la explotación infantil a la que se ven sometidos los niños. Para sacar una foto a un niño tenías que pagar la correspondiente cuota.
Además, lo más acojonante fue que Iñigo le dio un billete pequeño a un crio y como le pareció poca pasta,el chavalín rompió el billete.
Increible.
Carlos
PD: Alvaro, actualiza.
jejej yuju world press photo pa mi!
lo de los niños rompe dinero lo pongo en la proxima entrada!
Jejeje, me entra cargo de conciencia todos los días, pero llevo unos meses bastante a tope. Espero actualizar para la primera semana de Octubre!