Jordania, capítulo 8: Pollo negro
Nuestro único objetivo del día 8 era huir de Aqaba. Correr por nuestras vidas. Aqaba era una ciudad sucia, ruidosa, calurosa, y en general poco acogedora. Yo iba con grandes expectativas (e igual por eso la decepción fue mayor), pero acabé queriendo largarme de allí a toda costa. Teníamos un largo camino hasta el norte, ya que volvíamos hasta Madaba, donde Pilgrims House había sido nuestro lugar de referencia. Eran menos de 400 km, así que en teoría nos debería…