Eslovenia, capítulo 10: A remojo
Después de unos días un poco light, nos disponíamos a hacer algo épico: Visitar Ptuj. Después de un desayuno excelente en una de las terrazas de Maribor, y no saber nada más de nadie del personal del hostel de Maribor, arrancamos para ir hacia la ciudad con nombre de escupitajo. Ptuj se alzaba como una de las ciudades más ricas culturalmente del país, así como una ciudad famosa por sus balnearios. El plan era ver qué demonios había allí, y…