Diario de un calabacín en Islandia – Día 5: Cien kilómetros de soledad
Amaneció, que no era poco. El quinto día era el día más temido y a la vez más apasionante. El objetivo era subir a Askja, uno de los volcanes más brutos de Islandia. En 1875 hizo erupción matando a buena parte de la población cercana, la nube de ceniza llegó hasta Suecia, y los residuos que produjo envenenaron la tierra provocando una hambruna que hizo emigrar a otra gran parte de la población. Pues allí íbamos. Al maldito cráter, por…